La Sal Marina es nuestra meta
Salinera Española nació en 1878, desde entonces ha explotado diversas salinas del territorio nacional. En la actualidad el patrimonio productivo de la empresa lo forman las Salinas de Ibiza y las Salinas de San Pedro del Pinatar (Murcia).
En la primera mitad del siglo XX, y debido a la importancia que tenía la sal en la industria pesquera (salazón de bacalao, buques conserveros, y salazones en general), la empresa tuvo delegaciones en el extranjero. Terranova (Canadá) y Calcuta (La India) fueron algunos de los escenarios más relevantes de esta época.
Pese a seguir manteniendo un papel importante en la Industria Pesquera, la aparición de los buques congeladores y el refrigerador eléctrico fueron factores que provocaron un descenso del consumo de la sal en este sector, lo que determinó que la empresa reestructurara su política comercial, adentrándose en los nuevos mercados emergentes como la industria textil, química, farmacéutica, el sector de la alimentación, el tratamiento de aguas, etc…
Con ello se abrieron nuevos mercados en Noruega, Faroe Island (Dinamarca), Islandia o Reino Unido que son, en los últimos años, los países destinatarios de nuestras exportaciones.
Por lo que se refiere al mercado nacional, nuestra presencia se consolidó en los sectores más importantes de la expansiva industria española. Gracias a las fuertes inversiones realizadas en las Salinas de San Pedro del Pinatar, éstas se convirtieron en una de las factorías más modernas y avanzadas del panorama nacional en materia de alimentación y usos domésticos de la sal.
Esa política, nos lleva a la “Salinera Española actual”. Una empresa competitiva, moderna, en evolución continua, que se adapta a las necesidades de los nuevos tiempos y que, en los últimos años, ha incorporado a su patrimonio empresas del sector secundario que hoy en día constituyen una excelente red de distribución y comercialización.
Salineras en todo el territorio español
Las Salinas de Ibiza y San Pedro del Pinatar, ubicadas en la cuenca mediterránea, con la complicidad del Sol y la Brisa producen una sal de excelente calidad. Están integradas en parajes naturales y gran parte de la actividad salinera que se desarrolla en ellos, contribuye a garantizar su conservación y equilibrio cumpliendo así, una importante función ecológica.
La solidez de Salinera Española también es posible gracias al buen funcionamiento de nuestras delegaciones en Madrid y Barcelona y a la colaboración de nuestras empresas participadas como Sal Bueno, S.L. (Valencia) Y Vicente Suárez y Cia, S.L. (Galicia).
Más de 140 años de historia y experiencia nos avalan. Entre todos, Consejo de Administración, equipo directivo, trabajadores, y colaboradores, deseamos crear, como mínimo, un futuro tan esperanzador como próspero fue nuestro pasado.